El Gobierno Nacional amplió la clasificación de los residuos sólidos urbanos (RSU). El decreto 779/2022 publicado en noviembre reglamenta la Ley 25.916 que fue sancionada en 2004. La nueva reglamentación otorga al Estado una herramienta clave para fomentar la economía circular y la revalorización de los residuos domiciliarios.
En Argentina, uno de los principales problemas ambientales es la existencia de más de 5.000 basurales a cielo abierto y una infinidad de microbasurales en los centros urbanos. Según datos oficiales del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Nación, en promedio se generan 1,15 kilos de residuos por persona y el 64,7% va a parar a rellenos sanitarios. La porción de RSU que se recicla es muy baja.
La responsabilidad del cumplimiento de la Ley 25.916 recae casi exclusivamente en los municipios, los cuales a menudo carecen de los recursos económicos y las condiciones para llevar adelante una gestión adecuada de los mismos. Vale mencionar que en municipios pequeños el costo de la gestión de los residuos – en la mayoría de veces tercerizada – puede superar el 60% del presupuesto.
Uno de los cambios que incorpora la nueva reglamentación es la incorporación de principios como: de la cuna a la tumba, la responsabilidad extendida al productor, el ecodiseño, la gradualidad, la utilización de nuevas tecnologías y la trazabilidad. Además, en el Anexo II se recomienda a las provincias y CABA adoptar un sistema que contemple siete fracciones de residuos con sus respectivos colores. Este es un paso importantísimo para fomentar a que menos RSU lleguen al relleno sanitario y puedan ser recuperados por recicladores urbanos, disminuyendo costos en el transporte y la disposición y generando beneficios sociales y ambientales en las comunidades.
Si querés conocer más sobre la nueva reglamentación te invitamos leer el decreto completo en: https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/276572/20221128
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